lunes, 13 de febrero de 2012

Capitulo 5.

Era Sábado por la mañana, Maria se había despertado pronto y había bajado a hacer el desayuno. Estaba demasiado feliz, por fin su vida tenia un poco de sentido, solo le faltaba el amor para ser aun un poco mas feliz que antes.
Laura seguia durmiendo, se quedo hasta tarde pensado en como se lo iba a decir. Era complicado encontrar las palabras adecuadas, no quería hacerle daño.
Maria subió a la planta de arriba, había acabado de hacer el desayuno.
-Laura, venga despierta ya.
-Dejame un ratito mas- dijo con los ojos cerrados.
-He hecho tortitas...
Laura no contestaba, seguía durmiendo aun, o al menos intentándolo.
-Tambien hay nada...- siguió Maria.
Laura se levanto de un salto de la cama, le encantaban esas tortitas con nata. Bajaron a la cocina y epezaron a poner los vasos para echar la leche y todo eso. Cuando ya terminaron de prepararlo todo empezaron a desayunar. Habia un silencio un tanto incomodo, Maria lo rompió, odiaba esos silencios y mas con su amiga. Era señal de que le pasaba algo, porque Laura normalmente no callaba.
-¿Te pasa algo?- dijo un poco preocupada. Había estado toda la noche mas rara de lo normal.
-No- dijo con la boca llena- ¿Por?
-Es que nose, estas como... Rara.
Jajaja- soltó una carcajada un poco falsa, pero Maria no se dio cuenta- es que tengo mucho sueño.
-Ah bueno. Me estaba empezando a preocupar. Ya me quedo mas tranquila.
Laura sonrió y siguió desayunando. Pero su mente no dejaba de darle vueltas al asunto. Sabia una cosa muy importarte y sentía que no se lo podía ocultar mas. Se sentía mal. También tenia miedo a que la pillara, Laura no sabia mentir muy bien, siempre que lo hacia se ponía muy nerviosa y  no le salían las palabras. Definitivamente no sabia que hacer, era una decisión muy complicada.

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